El Al Hilal, conocido como el club más laureado de Arabia Saudita, volvió a captar la atención internacional al clasificar a los cuartos de final del Mundial de Clubes luego de derrotar al Manchester City por 4-3. El triunfo, considerado inesperado por la diferencia entre ambos planteles y la hegemonía que los ingleses han demostrado en el fútbol europeo, es apenas el último capítulo de una trayectoria repleta de éxitos regionales y proyecciones internacionales.
Fundado el 16 de octubre de 1957 bajo el nombre de Club Olímpico, su historia dio un giro decisivo un año después, cuando el entonces rey Saud bin Abdulaziz Al Saud lo rebautizó como Al Hilal. Desde la ciudad de Riad, la institución fue asentándose en la élite del fútbol saudí y regional, junto a su gran rival, el Al Nassr, donde actualmente juega Cristiano Ronaldo.
En sus primeras décadas, el club se destacó por el rápido acopio de títulos locales, con la Copa del Rey en 1961 y la Copa del Príncipe Heredero en 1964 como sus primeras coronas, consolidando su condición de potencia en la región.
El apodo Al-Za’eem, que significa “el líder” o “el que domina”, refleja la posición que ostenta. Nunca descendió desde su arribo a la máxima categoría y despliega un palmarés récord: al menos 19 títulos de liga nacional saudí, 13 Copas del Príncipe Heredero y 10 Copas del Rey. A nivel internacional, el club cuenta con ocho títulos asiáticos, siendo el máximo vencedor de la Champions League de la AFC (cuatro títulos).
La proyección continental llegó en 1991 con la conquista de su primer torneo asiático y se amplió en las siguientes décadas. En 2021, consiguió la Liga de Campeones de la AFC al superar por 2-0 al Pohang Steelers de Corea del Sur, asegurando así su boleto al Mundial de Clubes 2025.
A pesar de su laureada historia, el Al Hilal comenzó a tomar trascendencia mundial durante los últimos años, cuando optó por tomar una política agresiva de incorporación de talento extranjero para dar un salto de calidad y visiblizar el fútbol saudí.
Así como lo hizo el Al Nassr con Cristiano Ronaldo o el Al Ittihad con Karim Benzema, el club apostó fuerte al mercado europeo con fichajes de alto perfil. En 2023, tras la negativa de Lionel Messi, quien decidió continuar su carrera en Estados Unidos, logró convencer al brasileño Neymar. El astro paulista llegó tras dejar el PSG. Se sumaron a él el portero marroquí Yassine Bounou —figura del Sevilla y del Mundial de Qatar 2022—, el defensor Kalidou Koulibaly del Chelsea, el mediocampista Rúben Neves, que llegó desde el Wolverhampton, el serbio Sergej Milinković-Savić de la Lazio, el delantero Malcom, procedente del Zenit ruso y el defensor Joao Cancelo que llegó desde el Manchester City.
Estas incorporaciones no solo elevaron la competitividad del plantel, sino que incrementaron la visibilidad de la Saudi Pro League a nivel mundial.
El club, que disputa sus partidos de local en el Estadio Internacional Rey Fahd de Riad, también es reconocido por el desarrollo de figuras históricas locales. Yasser Al-Qahtani, máximo goleador saudí en la historia azul, y Salem Al-Dawsari, referente actual, ejemplifican la apuesta de la institución por el talento local y la combinación con figuras internacionales.
En el banquillo, la dirección técnica se renovó con la llegada del italiano Simone Inzaghi, tras la destitución del brasileño Jorge Jesus. El reciente ex finalista de la Champions League con el Inter, aceptó el desafío de liderar el proyecto saudí y firmó un contrato por dos años a cambio de 25 millones de euros anuales, lo que según los informes lo convirtieron en el entrenador mejor pagado del mundo.
Al Hilal ostenta otras marcas notables, como la racha invicta de 34 partidos entre 2023 y 2024, y una serie histórica de goleadas, con triunfos por 9-0 frente al Al-Deraa y Al-Hazem en distintas competencias nacionales. La institución también ha experimentado derrotas dolorosas, como el 0-5 ante Al-Taawoun FC en la Copa del Rey 2019, parte de una historia de casi siete décadas repleta de triunfos y desafíos.
La reciente victoria sobre el Manchester City, vigente campeón europeo y uno de los planteles más cotizados del planeta, significa un salto en la narrativa del fútbol saudí y del Al Hilal en particular. Instalado en los cuartos de final del Mundial de Clubes, el club parece decidido a continuar su expansión y a consolidar su estatus como uno de los nuevos protagonistas globales del fútbol.